A veces abrimos el cliente de League of Legends esperando pasar un buen rato, echar unas risas con los amigos o simplemente matar el tiempo. Muchas otras queremos competir. Y no, no necesariamente hay que estar en un equipo formalizado para hacerlo. Queremos conseguir nuestros lps y queremos subir de división. Porque sí, porque nos gusta ganar. Nos divierte ganar.
Pero claro, en algún momento, independientemente de tu forma de ser, la frustración aparece. De una forma u otra. Puede ser que un aliado haya hecho un facecheck innecesario en un arbusto, que otro haya creído 10 veces que ese intento era el bueno y mataría en 1vs1 al rival, o que el support haya ido varias veces a wardear la jungla enemiga cuando tu equipo no tenía ninguna presión para ello. O quizás, simplemente, tu equipo y tú habéis jugado genial, pero el equipo rival fue mejor. Y así varias veces, desencadenando la tan temida “racha de derrotas”.
¿Cómo se lidia con la frustración? ¿Cómo se gestiona el tilt? No tenemos una receta mágica porque cada juego y cada persona es un mundo, pero te dejamos 5 consejos que podrían ayudarte:
RECONOCE TU FRUSTRACIÓN
Parece obvio, pero eso no lo hace fácil. Muchas veces la frustración vendrá en plena partida, algo hará click y todo se volverá un caos en el que el jungla siempre estará ahí para gankearte, el enemigo siempre tendrá flash para escaparse a 10 de vida y te divearan en tu torre como si ésta estuviera apagada o fuera de servicio. Cuando notes que todo está saliendo mal, es que algo está mal. Para un segundo el ritmo frenético que conlleva una ranked de League of Legends y reconoce qué te está frustrando de esa manera.
RECUERDA TU POTENCIAL
Sabemos que es un juego en equipo, ¡pero la primera línea de defensa eres tú! Recuerda que tienes tus propias capacidades y conocimientos, tu propio talento. Nadie mejor que tú sabes cuáles son tus habilidades, qué se te da bien y qué se te da genial. Confía en lo que eres capaz centrándote en hacerlo lo mejor posible. Si algo tiene que frustrarte finalmente que sea después de haber dado lo mejor de ti mismo. Mejora tus capacidades para estar cada vez más seguro de que, por ejemplo, el tilt no vendrá por haber estado corto de reflejos.
RECUERDA TUS LÍMITES
Hay que ser conscientes de nuestras habilidades y de nuestras debilidades también. ¿Hasta dónde puedo llegar? ¿Puedo hacer esto o mejor espero a que mi medio pueda rotar a echarme un cable? No eres un pussy, ni un mediocre, por ser consciente de que cuando la frustración aparece no estamos al 100%. Es importante que sepas hasta dónde puedes llegar.
BUSCA OTRO ENFOQUE
Las personas que juegan al League of Legends son personas que no tiran la toalla con facilidad. Una sola partida puede propiciar muchas sensaciones desagradables, pero eso no es suficiente para hacerte dejar el LoL. ¡Después de todo también tiene muchas cosas buenas! Cuando algo salga mal y ya no tenga remedio, reajusta tu enfoque sobre esa situación. Es una oportunidad para ver qué torció toda esa jugada y qué puedes mejorar para la próxima situación in game similar. Conserva lo que te sirve y olvida lo que no.
MEDITA
¿Meditar? Qué somos ahora, ¿Karma? Pues sí, gamer, meditar. No queremos que pienses en posturas complicadas, ni mentes en blanco. Nada de eso. Es solo un pequeño momento del día que te dedicas a ti mismo para tomarte las cosas con calma.
Podríamos hacer una entrada dedicada especialmente a la meditación y al mindfulness, pero te bastará, por ahora, con saber que la meditación es una práctica cada vez más incluida en las rutinas de Occidente para gestionar las ansiedad, el agobio y la frustración. Solo necesitas responder a cuándo, dónde, cuánto y cómo.
¿Cuándo? En el momento de tu día a día en el que más relajado te encuentres. Puede ser por la mañana antes de haber jugado una partida, o por la noche, para calmar tu mente después de jugar.
¿Dónde? En donde no te puedan interrumpir. Tu habitación, tu despacho, la sala de estar si no hay nadie en casa…
¿Cuánto? Se suele recomendar 30 minutos de meditación al día, ¡pero eh! Estamos empezando. Así que con 5 o 10 minutos irás sobrado.
¿Cómo? Respira con tranquilidad y, sobre todo, con normalidad. No necesitas producir una respiración forzada y antinatural en ti. Presta atención a cómo el aire entra y sale de tus pulmones, disfrutando de esos minutos de sosiego y reparación para afrontar tus próximos retos.
0 comentarios
Trackbacks/Pingbacks